8 beneficios de usar una caminadora eléctrica
1. Más probabilidades de hacer ejercicio.
Tener una caminadora en casa o en el gimnasio te da la comodidad y practicidad de ejercitarte en un ambiente familiar y sin estrés. No tendrás que preocuparte por el tiempo que tardas en llegar a casa o en arreglarte para salir.
2. Entrenamientos de bajo impacto y amigables con las articulaciones.
Caminar en una caminadora es un ejercicio de bajo impacto, ideal para aliviar el estrés en las rodillas. La mayoría de las caminadoras tienen tecnologías que protegen las articulaciones del impacto al caminar o correr. Las cintas son flexibles y absorben el impacto, lo que es mucho mejor para tus rodillas que caminar en la calle.
3. Las caminatas son más seguras.
No necesitas salir de casa para moverte, lo que es especialmente beneficioso para las personas mayores. Además, evitas accidentes potenciales en la calle, como atropellos o robos.
4. Puedes entrenar según tus horarios.
Tener una caminadora en casa te permite elegir cualquier horario para entrenar, ahorrando tiempo y dándote mayor flexibilidad.
5. Puedes ajustar la inclinación.
En una caminadora, puedes cambiar la inclinación para aumentar la dificultad y la quema de calorías sin afectar negativamente tus articulaciones, algo que no es posible al caminar en la calle.
6. Puedes entrenar cómodamente para competencias.
Si estás entrenando para una carrera, una buena caminadora te ayuda a mantener el ritmo y proteger tus rodillas. Además, puedes obtener métricas exactas de la distancia recorrida y tu pulso cardíaco.
7. El clima y la temperatura no te afectan.
Con una caminadora, los problemas del clima como lluvias, nieve o rayos ultravioleta no serán un inconveniente. Puedes ejercitarte en casa sin preocuparte por las bajas temperaturas en invierno.
y último beneficio.
8. Puedes hacer ejercicio mientras trabajas.
Las caminadoras te permiten caminar o trotar mientras trabajas, integrando el ejercicio en tu rutina diaria de manera conveniente.