Medio siglo en los fogones se dice pronto, pero a Juan Mari Arzak se le ha pasado pitando. A sus 76 años, al cocinero que abrió la puerta a la modernidad gastronómica española desde la Nueva Cocina Vasca le ha llegado el momento del relevo. ¿Seguro? Su hija Elena, elegida en 2012 mejor cocinera del mundo, oficia de facto al frente del eterno tres estrellas del Alto de Miracruz. Pero el patriarca sigue en la brecha. Este es un día de confesiones, revelaciones y risas en los mercados, los bares y los rincones de su ciudad, San Sebastián. Arzak en su salsa.
Suscríbete a nuestro canal: cort.as/yI0n
Guarda la lista de El País Semanal entre tus preferidas: cort.as/cZgy
Síguenos:
Facebook: / elpaissemanal
Twitter: / elpaissemanal