Con su sello inconfundible, el periodista sarandiyense Leonardo Muraña, junto a la cámara de Juan Lucas Muraña, recorren el interior rural profundo del departamento de Durazno.
En esta oportunidad el encuentro es con parte de un patrimonio escondido, olvidado.
Una vieja y sólida estructura que pelea con el tiempo y se resiste a que el paso de los años la termine de borrar por completo de la geografía del lugar, sigue despertando intrigantes preguntas a los curiosos visitantes de turno.
Recorriendo la ruta nacional N° 6, se descubre - hacia un costado - una vieja pulpería, otrora lugar de parroquianos, de peones y forasteros, que encontraban en estos recintos un momento para la diversión y el pasatiempo, quemando sus gargantas con licores de dudosa procedencia y jugando eternas partidas de cartas, en trasnochadas tertulias del mostrador.