La reserva cognitiva se basa en la carga de anécdotas, aprendizajes y experiencias que vive una persona a lo largo de su vida.
Fabricio Ballarini, investigador del CONICET, explicó de una forma muy didáctica qué es la reserva cognitiva y compartió ejemplos.
"Pensémoslo como una forma de cultivar nuestro cerebro. No solamente, para vivir un momento alucinante, que es permitirse vivir; sino para el futuro", destacó.
En tanto, el especialista ahondó en cómo potenciarla, por ejemplo, en el caso de adultos mayores.
"Mantener conversaciones alimenta a nuestro cerebro", aseguró Ballarini. Y continuó con su valiosa explicación: "Tomarse la rutina de la lectura, sea cuál sea. Jugar al ajedrez, al ludo. Jugar con los nietos. Contar historias, alimentar al cerebro con historias para contar".
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