Para aquellos que buscan mejorar la comunicación con los demás, la asertividad puede ser la respuesta. Ser asertivo significa ser capaz de expresar lo que piensas y defender tus derechos sin ofender al otro y cuidando la relación entre personas. No se trata solo de hablar, sino de encontrar el momento, el lugar y la forma adecuada para decirlo.
La asertividad se basa en la honestidad y la claridad en tus palabras. Es importante ser directo y hablar con un objetivo en mente. Pero también debes ser adecuado y considerar el contexto. La libertad es un aspecto clave de la asertividad. No debes estar pendiente de la opinión de los demás y tomar decisiones proactivas que te permitan tomar las riendas de tu vida.
La asertividad es una forma de comunicación abierta y honesta en la que expresas tus sentimientos, derechos y necesidades. A través de la asertividad, puedes defender tus derechos sin agredir ni ser agredido.
Ser asertivo no siempre es fácil, pero es un habilidad que se puede desarrollar con la práctica. Algunos consejos útiles para practicar la asertividad incluyen:
-Identificar lo que realmente quieres decir y por qué lo quieres decir
-Encontrar un momento y un lugar apropiado para la conversación
-Hablar desde un lugar de honestidad y claridad
-Mantener un tono de voz firme y seguro
-Escuchar a la otra persona y tratar de entender su perspectiva