Contenido:
1. Acabó nuestra ilusión (00:01)
2. Ángela (02:26)
3. Me muero entero por tu amor (04:47)
4. Cambita Traviesa (07:46)
En esta oportunidad nos encontramos con una de las obras fundacionales de uno de los conjuntos modernos más importantes que vió nacer la ciudad de Montero, en Santa Cruz, la capital oriental de Bolivia. A mediados de los años 60, Adolfo Velarde “El Pavichi”, se desempeñaba como director de la reconocida Banda Pavichi, una de las más destacadas agrupaciones de Montero que consiguió reconocimiento popular a través de su participación como animadores en múltiples fiestas de carnavales.
Alrededor de 1973, nace la primera formación electrónica que antecede el material que hoy estamos presentando, conocida como la “Orquesta de los Hermanos Velarde” conformada por Adolfo Velarde en el saxofón, Jorge Velarde en la batería, Remberto Velarde en teclados, Lider Velarde en el segundo saxofón, Juan Carlos Velarde en la primera trompeta, Rómulo Suárez en la segunda trompeta, Carmelo Suarez en el bajo, Jorge Campos en guitarra y Denar Paz en la voz.
A finales de ese mismo año vería la luz LA ORQUESTA AGUILAS DE BOLIVIA, sobre la base de la Orquesta de los Hermanos Velarde y la incorporación de destacados músicos del oriente boliviano además de la importantísima participación del cantante y compositor Roberto Mauro. Esta formación los llevaría a grabar en el año 1974 una de las producciones más reveladoras de su amplia serie de discos, bajo el sello IMPERIO (EPI-928), con las canciones: “Angela” -soul- “Acabo nuestra ilusión” ambas composiciones de Roberto Mauro, “Me juego entero por tu amor” y “Cambita traviesa” en ritmo de taquirari.
Si bien LA ORQUESTA AGUILAS DE BOLIVIA se caracteriza por contener un sonido más afiliado a los ritmos caribeños y centroamericanos, con una elevadísima calidad en la ejecución y la interpretación a través de todas sus producciones, este disco que les presentamos hoy constituye una de las obras más importantes dentro del desarrollo de la nueva ola en el oriente boliviano, eslabón de mucha importancia en la nutrida y diversa historia del Rock Boliviano.