Mi perro tiene mal aliento. ¿Cuál es la causa?

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El mal aliento es una de las principales preocupaciones y uno de los motivos más habituales de consulta al veterinario.
El mal aliento del perro, puede estar causado por una gingivitis o por problemas digestivos.
La gingivitis se debe a bacterias que se fijan a la superficie de los dientes. Producen derivados azufrados de olor desagradable y dan lugar a una inflamación y a una hinchazón de las encías.
La gingivitis se puede evitar teniendo en cuenta estos consejos.
La práctica de cuidados regulares, que incluye el empleo de alimentos que masajeen las encías y eliminen las bacterias.
El cepillado de los dientes de forma habitual, con productos adecuados.
Y Compaginando con visitas regulares al veterinario.
Todo esto permitirá que los dientes y las encías del perro se mantengan sanos.
Por lo que el mal aliento de tu perro desaparece y da lugar a un aliento fresco y saludable.
El mal aliento en perros es un problema muy común. En muchas ocasiones, cometemos el error de considerar que es algo normal y no tomamos ningún tipo de medida para disminuirlo. Sin embargo, la halitosis en perros no solo es desagradable, sino que, a menudo, está relacionada con ciertas enfermedades bucales.
Si hemos detectado que la boca de nuestro peludo huele mal, es muy importante identificar su causa y aplicar un tratamiento lo antes posible.
Estas son las posibles causas del mal aliento en perros:
Comida maloliente: algunos perros tienen la costumbre de comer todo lo que encuentran por el suelo. La ingestión de algo maloliente puede causar mal aliento en los perros. Un buen ejemplo son aquellos peludos que practican la coprofagia, es decir, que comen heces.
Trauma: debido a una caída o pelea, muchos canes sufren roturas dentales, así como heridas de las encías o la boca. Estas son una puerta abierta para la entrada de microorganismos, cuya acción puede causar malos olores.
Periodontitis: es la principal causa del mal aliento en perros. Se trata de la inflamación de las estructuras que sujetan los dientes a la mandíbula. Esta inflamación se debe a una infección por bacterias, que producen una serie de compuestos malolientes.
Falta de higiene dental: no lavar los dientes al perro de forma rutinaria es otra de las principales causas de mal aliento, así como de enfermedades bucodentales como la ya mencionada periodontits. Esto se debe a que la falta de higiene propicia la acumulación de sarro y bacterias.
Otras enfermedades: algunas enfermedades que afectan a otros órganos pueden causar mal aliento en los perros. Es el caso de algunas patologías gastrointestinales, respiratorias o metabólicas. El olor se produce dentro del cuerpo pero sale hacia afuera por la boca.
Como ya anticipamos, la enfermedad periodontal en perros es la principal causante de la halitosis. Antes de que se produzca, tienen lugar una serie de procesos que debemos prevenir.
En primer lugar, las bacterias se acumulan en los dientes de los perros formando las conocidas placas. Posteriormente, se incorporan los minerales presentes en la saliva. Así se forma el sarro. Si las bacterias continúan extendiéndose, pueden llegar a infectar las encías, causando una enfermedad conocida como gingivitis. Es entonces cuando las bacterias comienzan a invadir los ligamentos y huesos que sujetan los dientes.
Finalmente, aparecen otras bacterias más peligrosas: las gram-negativas anaerobias. Estas bacterias fermentan la comida que se acumula en la zona infectada, así como algunos compuestos presentes en la saliva. Como resultado, se producen una serie de sustancias azufradas que causan el característico aliento en perros con olor a pescado o leche agria.
La periodontitis causa mucho dolor a los perros y es la principal causa de la caída de sus dientes. Por ello, es fundamental actuar antes de que se produzca. Sin embargo, esta no es la única consecuencia de esta enfermedad y de otras patologías que también producen mal aliento. Las bacterias causantes de estas patologías pueden alcanzar el torrente sanguíneo y desarrollar otros daños como insuficiencia renal o cardíaca, entre otros. Por este motivo, acudir al veterinario en caso de detectar halitosis en el perro es tan importante.

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