1. La historia de los escolapios es fascinante, porque empezó cuando encontraron el tesoro de educar a los niños más pobres. ¡En este video hay muchos tesoros!
¡Búscalos! ¡A ver si los encuentras!
2. José de Calasanz nació en Peralta de la Sal en el año 1557. Era el último de los ocho hijos de Pedro, alcalde del pueblo y herrero, y de María Gastón, maestra. Con once años, dejó su pueblo y marchó a estudiar a Estadilla. Era un joven estudioso, generoso y con una gran simpatía personal, lo que le hacía tener muchos amigos entre sus compañeros.
3. Cuando cumplió los catorce años, José de Calasanz descubrió su vocación: ser sacerdote. En un primer momento su padre no estuvo de acuerdo, ya que habían muerto sus dos hermanos mayores y José debería encargarse de la administración de las propiedades de la familia. Pero ¡Dios y José se salieron con la suya! ¡¡Al final fue ordenado en 1583, a los 26 años!!
4. Viajó a Roma en 1591 representando a su obispo para la habitual visita con el Papa. Pero, de paso, podría solicitar un puesto de más categoría en alguna catedral española. Esperando la respuesta, conoció de cerca las tristezas de la gente más pobre. Roma escondía detrás de sus famosos e imponentes edificios algunos barrios que sufrían muchas desigualdades.
5. Llegó la peste, que provocó enfermedad y muerte, y poco después presenció la inundación más catastrófica del siglo. Centenares de familias quedaron sin techo ni alimentos y Calasanz trabajó sin descanso ayudando a los afectados. Le impactó ver tantos niños y niñas sin escuela por falta de medios económicos.
6. En una humilde iglesia del Trastévere, Santa Dorotea, encontró un buen lugar para empezar a transformar aquella triste realidad, y creó junto a Don Brandini, el párroco, ¡¡la primera escuela gratuita del mundo!!. Estamos en 1597 y aquí empezó su gran proyecto, la escuela para todos, gratis: las “Escuelas Pías”. Invirtió todo su dinero en hacer crecer su escuela, alquiló diferentes casas, y en pocos años tuvo más de 500 alumnos .
7. ¡Un día le llegó la respuesta del Vaticano que tanto esperaba.! Pero José lo rechazó diciendo que en Roma había encontrado la manera definitiva de servir a Dios, ayudando a aquéllos pequeños, y no los dejaría por nada del mundo.
8. Pronto Calasanz comenzó a vivir en su escuela y formó una comunidad de personas consagradas a esa gran misión. En 1617 recibió la aprobación del Papa para ser una congregación religiosa: 14 maestros hicieron sus votos junto a Calasanz y así ¡¡¡nacieron los Escolapios!!
9. Calasanz organizó una escuela por niveles, con métodos nuevos y eficaces, muy parecida a las escuelas de hoy en día. Acompañó a los niños muy bien en las letras y las ciencias, para poder crecer como personas y superar los escalones de la desigualdad de la época. Además, aprendían todo lo necesario para la vida, y también a ser amigos de Jesús para cambiar el mundo y renovar la Iglesia basándose en un profundo amor hacia los demás.
10. Aún vivió unos cuantos años más nuestro José, siempre rodeado de niños. Hubo quien no vio con buenos ojos que los pobres tuvieran escuela, y le hicieron sufrir. Pero su confianza en Dios y su amor por todos hicieron que las Escuelas sobrevivieran y crecieran, haciendo felices a muchos niños.
11. Aguantó con paciencia y mucha fe todos los obstáculos que le pusieron, así se mantuvo firme junto a los niños y niñas. Después de una larga vida de dedicación a los más pequeños, Calasanz murió en Roma a los 90 años, el 25 de agosto de 1648. Sus restos reposan en la Iglesia de San Pantaleón
12. Hoy somos alrededor de 1400 los escolapios religiosos, repartidos en 44 países, cerca de los más pobres. También nos ayudan muchísimas personas más, que aman la misión de Calasanz.
13. Según la Unesco, más de 260 millones de niños y niñas no tienen acceso a la educación. Son los Trastéveres del siglo XXI. Aquí hay un tesoro escondido para quien quiera encontrarlo. ¿Te animas a ayudarnos?