“...Amigo mí, yo no soy lo que parezco. Mi aspecto exterior no es sino un traje que llevo puesto; un traje hecho cuidadosamente, que me protege de tus preguntas, y a ti, de mi negligencia”...
"…Tú amas la verdad, la belleza y lo justo, y yo, por complacerte, digo que está bien, y simulo amar estas cosas. Pero en el fondo de mi corazón me rio de tu amor por estas entidades. Sin embargo, no te dejo ver mi risa: prefiero reír a solas..."
Khalil Gibran describe los sentimientos descubiertos sobre una amistad, del cual, él deduce finalmente que no cree brindar una amistad apropiada y definida a la que hoy en día le damos significados mas adornados. Como resultado, el autor argumenta, describe, piensa y siente una amistad.
Este poema surge para recordar al hombre lo esencial de defender el derecho de cada individuo a recorrer su propio camino, en un mundo competitivo y sometido a la constante influencia de la sociedad. “Amigo mío” contempla el mundo con amor y sin juzgar; se limita a hablar de lo importante, en lo que casi nunca tenemos tiempo de pensar.